Dieta antiinflamatoria: ¿qué es y qué beneficios aporta?
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Equipo Apetece Cuidarse Oct 21, 2022 9:39:12 AM
El déficit calórico es, probablemente, el elemento más importante que debemos tener en cuenta si buscamos adelgazar o perder grasa corporal. Al conseguir un déficit calórico, es decir, que la cantidad de calorías consumidas en el día sea una cifra menor a la del total de las calorías que necesitamos, conseguiremos utilizar las grasas que nuestro cuerpo tiene acumuladas. De esta manera, nuestro cuerpo obtendrá la energía que nos ha faltado a través de la alimentación y, en consecuencia, conseguiremos adelgazar.
Si quieres saber más sobre el déficit calórico y cómo debes aplicarlo para perder peso sigue leyendo y te lo contamos.
El déficit calórico es el consumo negativo de calorías. Es decir, consumir menos calorías (a través de la comida) de las que el cuerpo necesita para sobrevivir. En consecuencia, como no consumimos las calorías suficientes como para satisfacer las necesidades de nuestro cuerpo, este se ve obligado a utilizar las reservas. Estas reservas de calorías son la grasa que tenemos acumulada en distintas partes del cuerpo.
Alcanzar el déficit calórico es esencial si queremos perder peso, ya que el cuerpo consumirá antes las calorías disponibles a través de la comida que aquellas que están acumuladas en forma de reservas de grasa. Si queremos quemar grasa, debemos alcanzar el déficit calórico. De lo contrario, solo conseguiremos mantenernos en el mismo peso o, en el peor de los casos, engordar.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), de media, las calorías que un ser humano adulto necesita consumir al día para vivir son las siguientes:
Esta estimación es general. Sin embargo, hay casos en los que una persona necesitará más o menos cantidad de calorías que las establecidas de forma general. Por ejemplo, no es lo mismo una persona sedentaria que una persona activa que un deportista de élite. Dependiendo de la actividad física que se realice, la demanda de calorías será mayor o menor.
Para entrar en déficit calórico es necesario consumir menos calorías diarias de las recomendadas. Es decir, en el caso de los hombres, deben consumir menos de 2.500 calorías al día (de media). Y en el caso de las mujeres menos de 2.000 calorías (de media).
Las dietas hipocalóricas son todas aquellas que están centradas en consumir menos calorías. Es decir, conseguir que la persona entre en déficit calórico y, de esta manera, que consuma las reservas de grasa que tiene acumuladas para alcanzar el consumo de calorías que su cuerpo necesita.
Este tipo de dietas ayudan a perder peso. Lo que se hace es contar las calorías de la comida que se ingiere a lo largo del día y se adapta para que no se supere el umbral de calorías recomendadas de ingesta diaria. Como norma general, en las dietas hipocalóricas se recomienda reducir unas 500 calorías diarias para conseguir tener resultados y reducir peso en forma de grasa.
Además, hay que tener en cuenta que, tanto si el déficit calórico se consigue con 500 calorías o solo con 100, si el cuerpo entra en déficit calórico, obtendrá estas calorías que le faltan de las reservas. Es decir, de la grasa acumulada, lo que nos permitirá adelgazar.
Uno de los problemas que presentan las dietas hipocalóricas es que, para alcanzar ese déficit calórico, se reducen las cantidades de los alimentos que consumimos. En consecuencia, también se reduce el aporte de muchos nutrientes esenciales para el cuerpo humano.
En este sentido, es esencial que, si vamos a empezar una dieta hipocalórica (sea más o menos restrictiva), escojamos bien los alimentos que vamos a comer. En este sentido, los alimentos que debemos elegir deben cumplir las siguientes características:
Lo más recomendable es centrar la dieta en alimentos que cumplan estas dos características. Es decir, que sean bajos en calorías pero, al mismo tiempo, altos en nutrientes. El mejor ejemplo de estos alimentos son los alimentos vegetales, como las verduras y la mayoría de las frutas frescas.
Además, siempre podemos complementar una dieta hipocalórica con suplementos alimenticios adaptados a nuestras características y condiciones. Los suplementos alimenticios nos permiten asegurarnos de que estamos cubriendo las necesidades básicas de los nutrientes diarios, algo muy importante en cualquier dieta hipocalórica. Si también combinamos la dieta y los suplementos alimentarios con ejercicio diario y una vida activa, podemos estar seguros de que alcanzaremos el déficit calórico sin problema y conseguiremos los resultados que buscamos.
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