Tarta de queso fit: ¡saludable y deliciosa!

¿Crees que una tarta de queso no puede ser un postre fit? Parece una preparación con muchas calorías, ¿verdad? Pues tenemos una buena noticia: con unas pequeñas modificaciones con respecto a la receta tradicional puedes hacer una tarta de queso fit: menos calorías y mismo sabor. Te contamos qué ingredientes son imprescindibles para que una tarta de queso sea saludable.

Ingredientes para hacer una tarta de queso fit

Por lo general, las tartas no se consideran alimentos saludables. Normalmente son postres que llevan bastante azúcar y harinas refinadas, dos ingredientes poco saludables. Pero es posible modificar algunos ingredientes para convertir este postre en una tarta de queso fit. 

Queso

En una tarta de queso, el ingrediente principal es, efectivamente, el queso. Pero hay muchos tipos de quesos entre los que elegir: queso crema desnatado, batido bajo en grasa, requesón, fresco… Para preparar una tarta más saludable, es importante elegir un queso bajo en calorías, aunque debe ser cremoso. Se considera bajo en grasa cuando aporta menos de un 10% de grasa. Y también elegir un queso que tenga ingredientes más naturales, evitando aquellos que tengan aditivos o féculas.

Edulcorante

El principal edulcorante utilizado en los postres, es el azúcar blanco. Para sustituir el azúcar, puedes utilizar el xilitol o la estevia o algún otro ingrediente como dátiles, plátano maduro, coco…

Huevo

Los huevos son otro ingrediente muy usado en repostería, ya que dan estructura y estabilidad a la masa. Además, aportan una gran cantidad de proteínas, por lo que es un ingrediente muy saludable para usar también en postres.

Yogur griego o skyr

El yogur aportará cremosidad y esponjosidad a las tartas. Al igual que con el queso, hay muchos tipos de yogures: elige los que tengan menos azúcares y grasas si quieres una tarta más fit.

Limón

Para dar un toque de sabor a una tarta, se usa habitualmente el limón, ya sea en zumo o en su ralladura. El ácido cítrico del limón es un conservante, antioxidante y emulsionante, por eso se utiliza mucho en repostería.

Harina

Las harinas son otro de los elementos más habituales en la repostería. En lugar de utilizar harinas refinadas, puedes utilizar una de las muchas harinas no refinadas que existen: de avena, centeno, arroz… Aportarán más calidad nutricional: más vitaminas, minerales y fibra a la masa. 

Frutos secos

Los frutos secos son un ingrediente con un gran aporte nutricional. Una opción a la hora de mezclar harinas, es usar harina de frutos secos. Con ello obtendrás todos los beneficios que aportan los frutos secos como fibra, vitaminas, minerales y grasas saludables.

Gelatina o agar agar

Es posible usar gelatina o agar agar para dar consistencia y textura a la tarta. Son ingredientes que aportarán proteínas y minerales y que, al mismo tiempo, son saludables.

Leche o nata

Muchas veces es necesario introducir la nata en la elaboración de un postre. En lugar de ella, es posible usar bebidas vegetales, leche desnatada, leche evaporada… Estos ingredientes aportan flexibilidad, elasticidad y mayor volumen a las tartas. Y aportan proteínas, calcio y otros minerales nutricionalmente hablando.

Frutas

La fruta es un edulcorante natural, que además aporta vitaminas, minerales y fibra. 

Receta de tarta de queso fit

Ahora sí, veamos cómo preparar paso a paso una tarta de queso fit deliciosa, ¡te encantará!

Ingredientes

• 500 g de queso bajo en grasa
• 100 g de harina de avena
• 125 g de yogur griego
• 2 huevos
• 2 claras
• 6 láminas de gelatina neutra
• 200 g de arándanos
• Una pizca de sal
• Limón
• Edulcorante (opcional)
• Aceite de oliva virgen extra

Elaboración

1. Precalienta el horno a 180ºC y cubre un molde redondo con papel y aceite de AOVE.
2. Bate los huevos junto con las claras.
3. Añade el yogur (sin el suero) y bate de nuevo.
4. Agrega la harina, la sal y el edulcorante (opcional).
5. Bate todo hasta que obtengas una masa homogénea. Si queda demasiado espesa puedes añadir un poco de leche o bebida vegetal.
6. Añade al molde y hornea durante 10-15 minutos o hasta que esté cocinada por dentro (puedes introducir un palillo para comprobarlo).
7. Por otro lado hacemos la crema de queso: para ello calienta 150ml de leche o bebida vegetal.
8. En un recipiente mezcla la leche caliente junto con las láminas de gelatina, remueve bien hasta que se deshagan por completo.
9. En una cazuela añade el queso escurrido (sin el suero), y la mezcla de la leche y la gelatina. Añade el edulcorante (opcional), mezcla todo y deja enfriar.
10. Una vez cocinada la base de la tarta y enfriada añade encima la crema de queso de forma uniforme. Mete al frigorífico durante toda la noche.
11. Prepara ahora la mermelada de arándanos, para ello lava los arándanos y ponlos en un recipiente de cristal.
12. Añade el zumo de medio limón, tapa con papel film y haz 3 o 4 cortes con un cuchillo. Introduce en el microondas durante 3 minutos.
13. Machaca con un tenedor.
14. Introduce también la mermelada en la nevera durante toda la noche.
15. Al día siguiente, desmolda la tarta con cuidado, añade la mermelada por encima y sirve. ¡A disfrutar!

Los postres y lo saludable no tiene que estar reñidos. Es posible hacer un postre tradicional, adaptado a ingredientes más saludables y naturales. Así, es posible hacer una tarta de queso fit y disfrutar de la misma manera. ¿A qué estás esperando?